LA ACTIVIDAD
¿Te imaginas caminar por un pasillo abierto en un gran mar vegetal de tonos rojo púrpura? Pues esto es lo que experimentarás mientras caminamos por la ribera del río Escabas y sus extensos cultivos de mimbre, un entorno de la Serranía de Cuenca que aporta el 90% de la producción del país. El marco es además hermoso por las hoces que ha esculpido el río en las rocas calizas circundantes.
El mimbre es una fibra vegetal utilizada por los artesanos para fabricar cestas, canastos, muebles y objetos de uso común o decorativos. Aún estando en el siglo XXI, aún no tiene sustituto por ejemplo para las barquillas de los globos aerostáticos por sus propiedades únicas para este fin. Como cesta para recoger setas no tiene paragón y tampoco para proteger el pan, entre otras muchas aplicaciones.
El mimbre presenta distintos colores del blanco al negro, pasando por rojos y dorados, dependiendo del momento en el que se encuentre, de la variedad y del proceso que haya experimentado. Si está en el período de máximo crecimiento, en estas fechas, muestra distintas tonalidades de rojo, hasta llegar al rojo púrpura, un color . Cuando se recoge y se coloca en haces muestra otro color, y pelado o más o menos cocido, otros. No se sabe con certeza de donde proviene aunque se sabe que era utilizado en las culturas egipcias y celta. El mimbre pertenece a la familia de los sauces y también con las láminas de madera de estos parientes ribereños se fabrican armazones, cestería y otras labores.
Antes de reservar, es imprescindible que te informes de los niveles de dificultad y del equipamiento necesario.